domingo, 1 de julio de 2012

LA SIESTA


La siesta es considerada como uno de esos pequeños placeres de la vida, especialmente recomendable en todos los sentidos por sus claros beneficios para la salud de las personas que la “practican”, pero aún sobre ella planean una serie de dudas y preguntas interesantes que son buenas tener en cuenta.
La costumbre de la siesta está muy arraigada en nuestro país; no es vano, esta costumbre es muy antigua.
El origen de la palabra se halla en la llamada por los romanos “hora sexta” (exactamente entre las 14 y las 16 horas), y por ejemplo era una costumbre de descansar tras la comida para luego conseguir así afrontar el resto de lo que queda de la jornada con mejor vitalidad y humor.
Los beneficios aportados por la siesta están siendo alabados por multitud de organismos científicos que aseguran que el bienestar que ofrece es incomparable a cualquier otra solución médica. Entre ellos destaca la disminución de los riesgos cardiovasculares, la liberación de tensiones, el aumento de la capacidad de concentración y el refuerzo del estado de alerta.

Beneficios:

  • Alivia tensiones, además de relajar.
  • Ayuda a descansar y a despejar la mente.
  • Aumenta la capacidad creativa, la intuición, la imaginación, y la propia capacidad de resolver problemas.
  • Previene el envejecimiento y alarga la vida, dado que, según algunos estudios, su efecto reparador es capaz de combatir los radicales libres.
  • Es bueno para mantener una belleza sana y natural, puesto que nos ayuda a reflejar luminosidad y frescor.
  • También es positiva para mantener una buena salud psíquica, especialmente porque nos ayuda a mantenernos positivos y a tener buen humor.
  • Reduce el riesgo de infarto.
  • Aumenta el rendimiento, eliminando la fatiga tanto física como mental.
  • Combate la ansiedad y el estrés.
  • Provoca una sensación de bienestar.

Algunos secretos sobre la siesta:
  • Dar un breve descanso al cerebro tras la comida es muy positivo, especialmente porque aumenta la capacidad de resolver problemas, estimulando la creatividad, la imaginación y la intuición.
  • Según datos ofrecidos por la Dirección General de Tráfico, en el año 2000 se produjeron unos 35.000 accidentes con víctimas por somnolencia de los conductores.
    En estos casos, la siesta es una aliada, dado que reactiva el estado de concentración y alerta.
  • En Córdoba (España), se decretó una hora oficial para la siesta, dado que entre las 15 y las 17 horas los niveles de sonido no podían superar los 55 decibelios, siendo por tanto la hora adecuada para la siesta.
  • Es una costumbre imprescindible para los niños, especialmente porque los tranquiliza y ayuda a que estén descansados, lo que evitará que lleguen a las siete de la tarde inquietos e irritados.

Aunque se piense lo contrario, la siesta más recomendable, para poder disfrutar así de todos sus beneficios, es la que oscila entre unos 10 minutos y 1 hora, aunque una siesta corta de 15 a 20 minutos sumada a ocho horas de sueño es ideal para disfrutar todos sus beneficios.